domingo, 21 de abril de 2019

LOMO EMBUCHADO CASERO

Foto: Óskar y Laura
     El lomo embuchado es un embutido muy apreciado en el pueblo. Se puede tomar en bocadillos o hecho rodajas a modo de tapeo, y mejor si es acompañado de unas habas tiernas o un puñado de cascaruja. Desde tiempos inmemoriales, la gente ha salado, secado y hecho embutidos con la carne del cerdo en las matanzas, pues antiguamente no tenían frigoríficos ni cámaras congeladoras. Y aquí es donde entra en juego la imaginación para aromatizar la carne con especias que, no solo le daban sabor, sino que evitaban que se pudriese y pudiera aguantar mucho tiempo en la despensa.

   El lomo que vamos a hacer en esta receta es muy sencillo, pues ni siquiera vamos a tener que "embucharlo" en el auténtico sentido de la palabra. Solo vamos a salarlo y a untarlo con un mejunje que lo preservará de las moscas y le dará un saborcillo riquísimo.


MATERIALES:

     1 cinta de lomo fresco de cerdo de 1 kg aproximadamente
     3 ó 4 kilos de sal marina gorda
     3 ó 4 dientes de ajo
     2 ó 3 cucharadas de pimentón
     1 cucharada de pimienta
     1 cucharada de aceite de oliva

Foto: Óskar y Laura
PREPARACIÓN:

     Metemos el lomo en un cajón enterrado con la sal y lo dejamos unas 15 ó 20 horas. Si el lomo pesa más, se puede dejar unas 24 horas, eso ya depende de su tamaño. Una vez pasado este tiempo, se saca, se sacude bien de la sal que le quede, se lava y se seca muy bien con un paño de cocina. Ahora preparamos en el mortero un majado con los ajos, el pimentón y la pimienta (según gustos, se le puede añadir un poco de romero o tomillo) y la cucharadita de aceite para hacerlo un poco más pegajoso y que no se despegue al untarlo. Incluso, si es verano y hay riesgo de que acudan moscas, el pimentón puede ser picante, pues este las ahuyenta más. Eso sí, luego ya sabes que cuando te lo comas vas a tener que beber algo más de cerveza de lo habitual...

      A continuación untamos bien la cinta de lomo con este majado, la perforamos con un gancho y la colgamos en un sitio fresco, seco y ventilado. A partir de que lleve secándose unos dos o tres días ya se puede empezar a comer, haciéndolo rodajas finas y acompañándolo de pan o, como he dicho antes, habas tiernas, cascaruja, un tomate partido, unas olivas....y por supuesto, una buena botella de vino o una familiar de cerveza.

Foto: Óskar y Laura




No hay comentarios:

Publicar un comentario

CAFÉ DE OLLA o MALTA

      El café de olla (o "agua de cebada" como se le conoce en algunas localidades de la zona levantina) es un sustituto perfecto ...

Las recetas más populares: