TOÑAS

Toñas redondas, listas para comer.

INGREDIENTES:

     - Harina (la que admita)

     - Levadura fresca

     - 2 medidas de agua tibia

     - 1 medida de aceite de oliva

     - 1 medida de azúcar

     - Raspadura de 2 limones

     - Matalauva

     - 1 pizca de sal

     - 1 cucharada de bicarbonato

     - 1 puñado de nueces y de almendras

     - 1 huevo

PREPARACIÓN:

     Se pone en un bol media medida de agua, una nuez de levadura fresca de panadero y un poco de harina para hacer la creciente. Cuando  haya fermentado (pueden pasar más de dos horas) se pone esta creciente en un bol bastante más grande con el resto del agua tibia, otra nuez de levadura, el azúcar, la ralladura de limón, el bicarbonato, el aceite,  la sal  y la matalauva. Se bate todo muy bien y se le va añadiendo  harina hasta que la masa esté blanda pero que no se pegue en las manos (lo que en el pueblo se conoce como “harina: la que admita”). Volvemos a  dejar que esta masa fermente hasta que triplique su volumen.

Listas para hornear.

    Se van haciendo las toñas redondas, de unos 15 ó 20 centímetros de diámetro, mojando las manos en aceite para que no se nos pegue la masa. Acto seguido se les ponen por encima nueces crudas y almendras un poco tostadas,  se les da huevo batido y azúcar, se dejan otra vez fermentar un poco y ya las metemos al horno. Este debe estar entre 180º y 200º, según veamos. Cuando adquieran el color tostado típico que todos conocemos, las podemos sacar y comérnoslas en cuanto hayan perdido el calor del horno.

     Este ha sido siempre un dulce típico de navidad, que se hacía en los hornos de leña tradicionales. Como hoy en día lo más sencillo es hacerlas en el horno eléctrico de casa, para aprovechar al máximo el espacio lo que se suele hacer es, en vez de hacer pequeñas toñas redondas, hacer una cuadrada grande que ocupe toda la llanda, y posteriormente, una vez enfriada, se corta en cuadrados de unos 10 centímetros de lado.

Toña cuadrada, ocupando toda la llanda.